El cine de género nacional va encontrando la manera de mantener su identidad y construir relatos universales. Gonzalo Calzada apuesta a lo diferente y termina ganando en esta versión aggiornada de películas de posesión.
Una joven deberá decidir si continua en el camino de la fe o si por ayudar a los demás deberá correrse, arriesgándose y arriesgando a cada uno que se le acerque. La lucha entre el bien y el mal sin subrayados. Una gran película de género.