Lucy

Crítica de Matías Lértora - Cines Argentinos

Lucy es 89 adrenalínicos minutos y un deleite visual para cualquier espectador.
Si bien no es lo mejor que ha hecho Luc Besson, ni tampoco lo más original porque ya se ha jugado mucho en cine y tv con la idea de lo que pasaría si una persona fuese capaz de utilizar más capacidad cerebral, el enfoque que se le da aquí es compacto, dinámico y al grano pero al mismo tiempo un delirio espectacular.
La fotografía y el montaje son tan rápidos que por momentos no dan respiro, y tanto las secuencias de acción como los efectos visuales son muy buenos.
Ahora bien, en cuanto a la historia -sin entrarle al debate de que si es muy volada o no- le falta un poco de sustancia como consecuencia de esa rapidez y eso es algo que se nota.
¿Scarlett Johanson? ¿Qué decir de esta diosa que camina entre los mortales que no se haya dicho? Al igual que siempre está excelente y una vez más demuestra que es la heroína de acción de ésta generación.
Su presencia en pantalla es tan fuerte (más aún con este personaje) que opaca al resto del elenco incluso a Morgan Freeman, que prácticamente se encuentra ahí por el cheque.
Otra cosa buena son conceptos que se arrojan, que si bien no son ninguna novedad tal como se marcó unas líneas más arriba, son esos temas que quedan picando en la cabeza y que luego uno googlea para informarse más, y ese es un plus de la película.
Lucy es puro entretenimiento muy bien realizado que pasa volando con demasiada velocidad y que se disfruta a pleno cuando no se es demasiado quisquilloso.