Como intento de realizar una comedia negra con algo de trasfondo social, “Madraza” pasa la mitad de camino pero no llega a su meta. Bien actuada, la historia de una mujer con demasiados problemas económicos que se transforma un poco a su pesar –y un poco no– en asesina a sueldo sirve para contar lo peor del mundo que nos rodea. Pero cierto exceso aleccionador por el absurdo termina lastrando un poco el resultado final. Prometedor film.