Una mala con el corazón roto
En lo que respecta al cine fantástico de Hollywood, cada día se desdibujan más los límites entre las películas dirigidas a un público infantil y aquellas para adultos: las historias tradicionales son readaptadas una y otra vez con más escenas de acción, situaciones adultas, tintes tenebrosos y, en algunos casos, con interesantes vueltas de tuerca. Dentro de esta moda, los estudios Disney no han sido la excepción y nos traen en esta oportunidad, con Maléfica, una nueva versión de La bella durmiente.
La película posee todas las características del género en su máximo esplendor: batallas y escenas de acción, grandes efectos en las escenas en 3D, un entero mundo encantado creado con realidad virtual, que es realmente una delicia. Las hadas, los duendes, los seres del bosque, luciérnagas de colores y otros personajes fantásticos dan ganas de sumergirse en el “páramo” que menciona la historia.
Además de los escenarios y los efectos, los vestuarios de todos los personajes son alucinantes, dignos de un buen cuento de hadas. Los personajes también están bien construidos, en particular Angelina Jolie, quien encarna seguramente la versión más hermosa y tétrica de la villana del título (seguramente en Estados Unidos este año va a ser el disfraz más popular para Halloween), que aquí es por primera vez protagonista del cuento de La bella durmiente. Se destacan también la dulce Elle Fanning como Aurora y Sam Riley, encarnando el cuervo asistente de Maléfica, pero tampoco tanto porque la protagonista indiscutible es Angelina.
Más allá de todos los logros técnicos, lo más interesante en una película tan comercial, realizada por una productora que se ha encargado de difundir en varias generaciones modelos de princesas débiles y superficiales, es la vuelta de tuerca en la historia. Más allá de la existencia de la tradicional maldición, ya no es el amor de un príncipe el que logrará rescatar a la princesa, sino el amor verdadero. Por otro lado, la supuesta hada malvada deja de ser tan mala como en el cuento tradicional y es solamente alguien vengativo porque le rompieron el corazón, o sea que los “malos” ya no son tan malos y tienen sentimientos. No les quiero adelantar el final, pero el mundo natural y femenino sale victorioso de esta historia: pareciera que los fuertes ya no son los hombres con poder material y fuerza bruta, sino aquellos que dejan prevalecer sus sentimientos antes que nada y aman las cosas simples de la vida y la naturaleza.
Lo cierto es que Maléfica es una buena opción de entretenimiento en 3D, quizás no para toda la familia, ya que a algunos niños les resultará un poco tétrica, pero sí para jóvenes y adultos amantes de los cuentos de hadas.