“Maligno” de James Wan. Crítica. De otra época.
Que aire noventero que tiene esta película.
Francisco Mendes Moas Hace 1 día 0 4
Los románticos suelen decir que uno siempre vuelve al primer verdadero amor, aplicable a muchos conceptos e incluso a James Wan. Tras su paso por el mundo superheroico, el icónico director de género vuelve al terror una vez más. “Maligno”, es el nombre de su última obra, la cual llega a los cines de todo el país el 9 de septiembre. Una retorcida historia donde se ponen en juego la concepción de los lazos familiares.
Noche tras noche Madison presencia horrendos asesinatos por parte de una figura negra. Esto comienza luego de que su novio la golpeó fuertemente en la nuca. Pero poco a poco descubre que estos sueños vividos, son aterradoramente reales y ella queda enredada en medio de los crímenes. Al mismo tiempo que se desenmaraña su oscuro pasado, siguiendo las migajas, como Hansel y Gretel.
Un combinado de géneros, terror, policial, thriller, además de otro tanto de referencias se fusionan todos en la masa madre que propuso Wan. Comenzando con una trama clásica que poco a poco se desinfla dentro de una investigación policial y llega a un puerto extraño donde no se termina de entender si debemos asustarnos o reírnos. Pero siempre teniendo la oportunidad de hacer ambas.
Pudiendo así dividir la película en una mitad tediosa y repetitiva, donde se plantean los conflictos y se desarrollan los lazos familiares entre las protagonistas. En cambio, la otra mitad mucho más dinámica e inverosímil, que para esa altura es algo que ya deja de preocupar, deja de lado dichas preocupaciones para brindar un baño de sangre y fracturas expuestas que vuelven a captar la atención del espectador.
Algunos destellos de giallo italiano se desprenden como los mejores momentos. En simultáneo podemos decir que tenemos aquí un slasher tradicional donde no faltan los asesinatos y agradecidamente sobra el gore. Sostenido todo con esta obsesión que tiene James con diferentes planos de la realidad corriendo en simultáneo, generados con un efecto interesante que pierde fuerza cada vez que lo volvemos a ver. El arma, ícono del asesino en los slashers, es innovador, pero poco práctico en caso de secuelas.
Si bien el objetivo de estos productos es asustar y entretener o divertirse asustando, no tenemos aquí a uno de los mejores productos de James Wan. “Maligno” rememora aquellas épocas de videoclub, un viernes a la noche, donde alquilabas la comedia dominguera y la de terror para el sábado. Tras muchos viernes terminaremos alquilándola, pasando un buen rato, pero olvidando rápidamente.