Podríamos decir que muchas de las películas seleccionadas para el Oscar de este año rondan sobre las mismas temáticas. Tal vez a primera vista no lo notamos, pero detrás de cada historia nos encontramos con personas que intentan superar su pasado o presente, aceptarse a sí mismos y que los demás también lo hagan. Son todas historias fuertes y que quedarán en la memoria del espectador.
“Manchester by the sea”, dirigida por Kenneth Lonergan (“Analyze This”, “You Can Count on Me”) sigue esta línea de historias crudas (tal vez sea la más fuerte de todas), en la cual los protagonistas deberán superar distintos obstáculos del pasado y del presente.
La película se centra en Lee Chandler (Casey Affleck), un plomero de un pueblo cerca de Boston, quien se ve obligado a regresar a su pequeño pueblo natal luego de enterarse de la muerte de su hermano. Allí se encontrará con su sobrino de 16 años, del que deberá hacerse cargo, mientras tendrá que lidiar con un pasado trágico que mantuvo en secreto durante mucho tiempo.
Uno de los puntos más fuertes del film es la actuación de los protagonistas, sobre todo la magnífica performance de Casey Affleck. “Manchester by the sea” recae íntegramente en las emociones, acciones y reacciones de este personaje tan misterioso como introspectivo. A medida que avanza la historia (continuamente tenemos flashbacks que sirven de apoyo) nos vamos enterando más detalles de la vida de Lee Chandler, logrando no solo entenderlo sino empatizar con él.
El relato se torna pesado por momentos, con un ritmo lento, justificado por sus casi dos horas y media de duración, pero que a la vez hacen al argumento. No podemos tener un film ligero ni llevadero, sino que la trama cruda necesita de un ritmo acorde que sirva de acompañamiento. Una vez finalizado el film, el espectador quedará angustiado y reflexionando.
Además del ritmo, la ambientación también acompaña perfectamente al relato. Un clima sombrío, nevado, frío. El tiempo parece transitar, pero las estaciones no se modifican.
En síntesis, “Manchester by the sea” relata una historia fuerte y cruda, a través de la fortaleza de su protagonista Casey Affleck. Con un ritmo lento y pausado, necesario para generar un clima acorde y profundizar los detalles de sus personajes, Kenneth Lonergan realiza un drama que no apunta a los golpes bajos para contar un argumento sobre las tragedias humanas y la superación o no superación de ellas.
Puntaje: 4/5