Adolescentes for Ever
Mar del Plata (2012) es una película sin grandes pretensiones que focaliza sobre dos amigos treintañeros que emprenden un viaje corto a la ciudad balnearia con el plan de pasar unas vacaciones de fin de semana.
La ópera prima de Ionathan Klajman y Sebastian Dietsch resulta una comedia ligera sobre el conflicto del síndrome de la eterna adolescencia o peterpanismo. Joaquín (Pablo Pérez) y David (Gabriel Zayat) son dos amigos de la infancia que ya han pasado los treinta y pico de años. Ambos tenían parejas pero fueron abandonados. En medio de esa crisis existencial y producto de la causalidad emprenderán un viaje de fin de semana a Mar del Plata donde actuarán como verdaderos adolescentes, aunque renieguen de ellos.
Los realizadores toman elementos del cine de Wes Anderson, pero no como copia sino como fuente de inspiración para generar una historia fresca sobre los vínculos, la amistad, el amor y el paso del tiempo de la misma manera que Esteban Menis lo hacía en Incómodos (2008) o como la antítesis de Villegas (2012) de Gonzalo Tobal, en la que dos primos viajan a la ciudad homónima tras la muerte del abuelo.
Especie de road movie personal, cargada de humor acido y a la vez naif, protagonizada por dos personajes queribles por su inmadurez, da como resultado un producto dinámico, que divierte, cuenta una historia y deja al espectador contento con lo que vio. Cero pretensiones para pasarla muy bien y volver a sentirse el adolescente que aún se es.