Promocionada como película para adolescentes, (Todavía no se si por la temática o porque los tratan de estúpidos), le hace honores desde el titulo.
La sinopsis del filme nos cuenta que Travis Maddox (Dylan Sprouse) es exactamente lo que Abby Abernathy (Virginia Gardner) necesita y quiere... evitar en su primer año de universidad. Pasa las noches peleando en combates clandestinos de boxeo, y durante el día es un estudiante ejemplar y el seductor del campus. Abby no quiere tener nada que ver con Travis, pero él le propone una apuesta: si pierde su próxima pelea, estará un mes entero sin sexo; si gana, Abby deberá vivir en su apartamento durante ese tiempo. (¿QUE?). Travis no tiene ni idea de que el oscuro pasado de Abby está a punto de salir a la luz, desatando un tornado de emociones, obsesiones y juegos que los terminará dañando... aunque puede que también los una para siempre. El interrogante agrandado es mio, personal. El filme tiene mucho de desastre y nada de maravilloso, con una estética demasiado inocua y una estructura narrativa tan