Luego de un terrible accidente automóvilistico Charlie St Cloud (Zac Efron), ha perdido a su hermano menor, Sam. Ahora Charlie pasa sus días en los terrenos cercanos al cementerio, ya que el vínculo de estos dos hermanos parece haber superado a la muerte y todos los días son capaces de comunicarse, de verse e incluso de practicar su juego preferido: el béisbol. Pero ante los ojos de sus vecinos, Charlie cada vez actúa más raro y más aislado.