La de David Gordon Green es una carrera prolífica, ecléctica y con altibajos. De mimado en el cine independiente con George Washington y All the Real Girls, pasaría con diferente suerte por el terreno de la comedia –hay Pineapple Express y Eastbound and Down, pero también las pobres Your Highness y The Sitter-, para luego volver a dramas más íntimos como Joe o Manglehorn. Un cineasta impredecible, que parece sentirse cómodo fuera de cualquier zona de confort, venía de tropezar con la comedia dramática de alto perfil Our Brand is Crisis pero ahora se sacude el polvo con Stronger, con la historia real de un “héroe” imperfecto que desafía los lugares comunes del género.