La película cuenta la historia de Julián Alvarenga, un joven aparentemente exitoso, rutinario, reflexivo, culto, de 25 años que ha tomado una decisión drástica: suicidarse.

Previamente, quiere darle un sentido a lo que le queda de vida y tiene un plazo: en una semana debe saldar sus cuentas pendientes con la vida.
En primer término, dando un portazo en un trabajo que lo frustra; en segundo lugar, con el Amor, materializado en Lucía, una hermosa joven de 18 años, a la que dejará, sin tener en cuenta sus verdaderos sentimientos; luego, con su Familia, en su vuelta a su pueblo natal, donde se reencontrará con su Madre y Camila, su hermana, con quiénes lo une una particular relación.

Esa vuelta a los orígenes, le posibilita reunirse con sus amigos de siempre, en una potencial última cena. Pero esto no resulta suficiente para Julián. Saldó las cuentas, pero necesita irse con saldo positivo y trascender en la vida, algo que según él nunca logró.

Julián planea dejar un legado a la sociedad. El asesinato del dictador genocida Jorge Rafael Videla. Resultado de una sociedad violenta, tomando una decisión violenta, Julián correrá inmensos riesgos, pero el fundamental radica en no convertirse en el mismo monstruo al que quiere matar.