Tres mujeres israelíes, muy distintas entre sí, viven en Tel Aviv. Sus historias se entrecruzan en un particular retrato de un Israel moderno. Batya, mesera de catering, recoge a una niña abandonada en la playa. Batya trabaja en la boda de Keren, que se queda encerrada en el baño y se quiebra la pierna tratando de salir, lo que arruina su romántica luna de miel en el Caribe. Una de las invitadas a la fiesta es Joy, una mujer filipina que no habla hebreo, y que carga con la culpa de haber dejado a su hijo en las Filipinas.