Las nuevas generaciones de adolescentes necesitaban su saga adaptación de novela Young Adult (Literatura YA) del momento. Es por eso que Fox y uno de los productores de Stranger Things decidieron que era el momento de The Darkest Minds. Una historia bastante predecible protagonizada por Amandla Stenberg, a quien tal vez recuerden por su papel de Rue, la niña del distrito 11 en otra adaptación de novela adolescente: Los juegos del hambre.
Se ubica en un futuro cercano, donde un día sin explicación aparente los niños empiezan a enfermar y morir. El 98% de la población infantil muere de esta misteriosa enfermedad: el restante 2% de los pequeños sobrevivientes presentan extraños poderos, razón por la cual comienzan a ser considerados enemigos del estado y son encerrados en campamentos de “rehabilitación”.
Como protagonistas de esta nueva distopía adolescente tenemos a jóvenes promesas de Hollywood: Amandla Stenberg (también conocida por Todo, Todo), Harris Dickinson (Beach rats), Miya Cech (talentosa japonesa de 11 años), Skylan Brooks (quien participó en la serie de Baz Luhrmann The Get Down), junto a Mandy Moore (This Is Us), Patrick Gibson (The OA) y Gwendoline Christie (Game of Thrones).
Conoceremos a Ruby Daly (Stenberg) justo el día en que cumple 10 años, celebrando junto a sus padres con alegría y algo de esperanza, a pesar de la enfermedad amenazante que recorre las calles de su ciudad. Pero ese día algo despierta en ella que la terminará separando de su familia, dejándola en manos del gobierno de los Estados Unidos.
Y como el gobierno le teme a los niños sobrevivientes creó los campamentos, donde supuestamente serán curados. Allí se los separa por colores de acuerdo a sus habilidades aterradoras que no pueden controlar. Azul, Verde u Oro, Naranja y Rojo representando a los niños más poderosos, que a la vez resultan los más peligrosos.
Y así, esta historia en particular se centra en esa chica que logra escapar de uno de estos campamentos. En el camino se encuentra con Zu, Liam y Charles (Chubs para los amigos), otros sobrevivientes que la acompañarán en una travesía donde terminarán ayudándose unos a otros como familia, tal como atestigua Liam en una escena : “Todos somos casi huérfanos, nos tenemos los unos a los otros”.
Los jóvenes serán perseguidos por La Liga y también por varios cazarecompensas (entre ellos la temible Lady Jane). Sus objetivos, además de tratar de sobrevivir y no ser capturados, serán encontrar a aquel que llaman Escurridizo y al grupo EDO, que parece ser el paraíso de los jóvenes.
Shawn Levy, productor ejecutivo de Stranger Things, cuya compañía 21 Laps está produciendo Mentes poderosas, recordó que obtuvieron los derechos del libro hace cinco años (cuando estaban en su apogeo estas adaptaciones). “Creo que esta historia tiene un tema atemporal“, agrega otro de los productores, Dan Levine. “Y es tan universal. Se trata de que los niños crezcan, se conviertan en adolescentes y descubran que son diferentes, algo que las personas no entienden, especialmente los adultos y el gobierno. Entonces son arrojados a los campos. Y la historia sigue a estos niños que se convierten en adultos jóvenes, aprenden a defenderse y protegerse a sí mismos. Creo que el miedo a encajar y la búsqueda de la aceptación a menudo nos siguen hasta la edad adulta“.
Hasta aquí todo muy lindo, pero la verdadera pandemia parece ser la falta de carisma de su protagonista. Mentes poderosasresulta otra distopía adolescente (¿cuántas vamos ya?) absolutamente predecible y con personajes que generan poca empatía. Es cierto que tenemos algunos pocos momentos cómicos con Chubs, el tramo al estilo road movie, e incluso chistes de Harry Potter, pero esto no alcanza. La historia no atrapa y el personaje más carismático y querible terminará por ser Zu, la niña japonesa que no emite palabra en los 104 minutos de duración de la película.
Mentes poderosas toma prestados casi todos sus ingredientes de otras franquicias populares de ciencia ficción. Hay un poco de Los juegos del hambre, otro poco de X-Men y algo de Crepúsculo. Hay pocas escenas de acción y nadie resulta destacar por sobre los demás. Es el comienzo de una trilogía (que se completa con los libros NEVER FADE y IN THE AFTERLIGHT), con lo cual es lógico que se tome su tiempo para presentar los personajes y el conflicto, sin embargo hay algún condimento que les faltó, porque uno no se queda demasiado intrigado. Casi no quedan ganas de ver que sucederá en las películas siguientes, sobre todo porque uno ya se lo imagina.