Esta producción despertó una enorme expectativa. El trabajo de un director después de codearse con el Oscar y la osadía de meterse en una de animación para chicos y grandes, una verdadera proeza técnica, de presupuesto millonario. El argumento, inspirado en un cuento corto de Fontanarrosa, con varios guionistas y la escritura final de Eduardo Sacheri, tiene todos los ingredientes para llegar al corazón. Dedicado a los niños con el espíritu de “Luna de Avellaneda”, la lucha entre la tradición frente al marketing, los valores de siempre frente a la prepotencia del poderoso que compra el pueblo de su infancia para destruirlo todo. El fervor vivido en equipo, la amistad, la magia. Guiños para adultos, diversión para los chicos, mamás y nenas no abstenerse.