El abuelo sinvergüenza
Antes de empezar es necesario aclarar que no hay que confundir Mi abuelo es un peligro con El abuelo sinvergüenza (Bad Grandpa, 2013), aquella de la factoría Jackass donde Johnny Knoville estaba caracterizado como un anciano de 86 años. No comparten casi nada en común excepto por la premisa de un particular abuelo.
Jason Kelly (Zac Efron) es un joven abogado que está a punto de casarse con la fría y controladora Meredith (Julianne Hough), la hija malcriada de uno de los socios del buffete para el que trabajan. Días antes de la boda fallece la abuela de Jason y con profundo dolor su abuelo Dick (Robert de Niro) le pide que lo acompañe a Florida, el joven acepta pero descubrirá que su abuelo no es el anciano acongojado que parecía sino que es malhablado, bebedor y busca tener sexo a toda costa con alguna joven. En su camino se cruzarán Shadia (Zoey Deutch), una idealista ex compañera de Jason, y Lenore (Aubrey Plaza), una universitaria descontrolada que caerá rendida ante los peculiares encantos del abuelo.
Zac Efron vuelve a la comedia después de coprotagonizar Buenos vecinos (Neighbors, 2014) con Seth Rogen; se lo podrá ver otra vez este año en Mike and Dave Need Weeding Dates (2016) y en la secuela de Neighbors. En este caso es un joven de alta sociedad que deberá soportar las ideas de su delirante abuelo, los constantes llamados de su insoportable novia y las presiones de sus padres.
Es un misterio cómo elige los proyectos Robert de Niro, en este caso se separa de sus últimos dos papeles en grandes producciones como Pasante de moda (The Intern, 2014) y Joy: El Nombre del éxito (Joy, 2015); es él quién genera el mayor interés en el film y se convierte en la base que lo sostiene, además hay buena química con Efron y Aubrey Plaza quién en cine ha ido por papeles en películas indie, y por ser April Ludgate en la serie Parks and Recreation (2009-2015).
La comedia americana sabe cómo entregar películas donde abundan las situaciones vulgares con chistes sexuales, drogas y desnudos. Además de los chistes por demás repetidos sobre la vejez del personaje de Robert de Niro, en este caso se pueden encontrar pocas realmente divertidas y que sacan una risa de verdad.
Mi abuelo es un peligro no es una idea muy original y técnicamente es correcta sin nada que destacar, el guionista John Phillips deja algunos baches que el director Dan Mazer intenta tapar con más buenas intenciones que ideas en sí, cumple con el cometido de no aburrir aunque a partir del segundo acto se vuelva algo predecible.