Un poco de Miyazaki, otro de King Kong, algo de El Libro de la Selva, y otro de Jurassic World -incluida la presencia de la colorada Bryce Dallas Howard-. Con todo eso, curiosamente, se obtiene una feliz sorpresa del cine de aventuras para toda la familia como Mi amigo el Dragón. Es la historia de Pete, que crece en el bosque al amparo de Elliot, el dragón verde que lo protege hasta que, claro, la civilización, tan contenedora como amenazante, descubre que estuvieron ahí todo ese tiempo sin que nadie supiera. Hay grandes emociones sin golpes bajos, aventuras fantásticas y personajes queribles, tanto humanos como animales.