Héloïse (interpretada por Sandrine Kiberlain) es una mujer divorciada, con tres hijos, Jade (Thaïs Alessandrin), Théo (Victor Belmondo) y Lola (Camille Claris). Sus hijos mayores ya abandonaron el hogar que compartían con su madre para poder progresar con su vida adulta, mientras que quien convive con Héloïse es Jade, la hija más pequeña, la cual se encuentra atravesando su último año de secundario. Sin embargo, Jade es aceptada en una Universidad de Canadá, por lo tanto, apenas termine el colegio, la chica deberá dejar su casa y así su madre quedará sola.
La mujer no tendrá más la compañía de su pequeña hija con la cual vive complicidades a lo largo del film y para no perder estos divertidos momentos, la protagonista decide filmar los últimos días de convivencia con Jade, aunque se dará cuenta de que las grabaciones no serán lo más imprescindible para mantener los recuerdos.
Lisa Azuelos produce, dirige y escribe el guion de este film que nos trae la difícil situación que debe afrontar la protagonista ante la retirada de sus hijos de su hogar. Esta sensación de nido vacío que padece Héloïse a lo largo de la película se combina con los instantes humorísticos que decide implementar la mujer para sobrellevar de una mejor manera los hechos. Es interesante destacar que no se muestra a la protagonista inmersa en una gran tristeza constante, sino que se la presenta como una mujer independiente que, además de ocuparse de sus hijos, se encarga de un restaurante, planea salidas con sus amigas, citas, entre otras acciones. La buena actuación de Sandrine Kiberlain es importante para el desarrollo de la historia debido a que ella forma parte de la mayoría de las escenas de la cinta.
Con respecto a la manera elegida para narrar los hechos, los mismos se conectan unos a otros con un montaje que los une de una manera lineal, aunque se ven interrumpidos por flashbacks, algunos de ellos que constan de breves instantes, otros un poco más extensos, para contar experiencias pasadas de la familia. Los más atrayentes resultan los más reducidos, debido a que una imagen, una manera de actuar o un momento transportan a Héloïse al pasado, ese mismo presente ya había sucedido un tiempo atrás en el cual sus hijos eran pequeños. Son estos recuerdos los que reafirman el paso del tiempo, lo distinta que es su vida ahora y lo mucho que extrañará la presencia de sus tres hijos unidos en su casa.
En resumen, «Mi niña» es otra buena opción para visualizar de forma online en esta cuarentena. En este caso, el público quien más lo disfrutará es aquel que se encuentre sobrellevando una situación similar para visualizar las acertadas reflexiones que expone la película. Sin embargo, también la recomendamos a aquellos que quieran ver un film agradable y cómico, con buenas actuaciones y una historia que, aunque fue desarrollada en otras oportunidades en variados films, logra atrapar y entretener al espectador.