Mi primera boda

Crítica de Martín Morales - MM Críticas

CUANDO EL CAOS SE APODERA DE UNA FIESTA

Comedia argentina que toma un estilo narrativo poco familiarizado con el cine nacional y que, desarrollando un aprovecho impecable de cada uno de sus intérpretes, logra crear un relato de enredos divertido, hermosamente fotografiado y con las necesarias vueltas de tuerca como para hacerle pasar al espectador un grato y sorpresivo momento en la sala.
La cinta se centra en contar cómo fue el casamiento de Leonora y Adrián. Ella es cristiana, mientras que él es judío, por lo que deciden hacer una celebración mixta. La pareja quiere que todo salga redondo y sin inconvenientes, pero un error del novio va a ocasionar que todo lo antes planeado comience a seguir un trayecto inesperado y caótico. Solo él puede solucionar los problemas, pero al tratar de hacerlo va a ocasionar que otros empiecen a aparecer, haciendo de su casamiento la peor experiencia de su vida.
Esta película desarrolla un estilo que se asemeja bastante al presentado en muchas películas extranjeras, en las que una simple situación se convierte en un martirio para sus protagonistas. Pese a que la referencia a, por ejemplo "Muerte en un Funeral", está presente, la cinta logra sobrepasar los prejuicios y expresar una serie de enredos argumentales que están muy bien logrados y conforman una película en la que continuamente está sucediendo algo para mantener entretenido al espectador. El humor aquí presentado pasa por muchas variantes y se centra principalmente en las actitudes de cada uno de los personajes: el novio torpe, la novia controladora, el abuelo que decide dar cambios en su vida, el ex que quiere romper con el futuro matrimonio, y muchos otros. Cada uno de ellos tiene su momento de destaque y, gracias a un guión que desarrolla sus personalidades de manera clara y algo estereotipadas, las situaciones graciosas e ingeniosas son bastantes.
Las actuaciones son muy buenas. Cada intérprete logró aprovechar a su personaje para remarcarle alguna característica física o actitudinal predominante. La dupla protagónica es muy fresca y desde el comienzo forman una química muy buena. Natalia Oreiro desarrolla una dulzura que poco a poco se va transformando en ira y remordimiento que está muy bien interpretada, mientras que Daniel Hendler logra expresar esa torpeza que identifica a su personaje, pero también el amor y el realismo necesario en algunos momentos. Quienes lo acompañan tienen un lucimiento impecable y, pese a que algunos desarrollan roles que aparecen pocas veces, logran sacarle provecho a sus momentos. Entre ellos se destacan: Imanol Arias (el antagonista, serio, irónico y manipulador); Soledad Silveyra, quien juega con su tono de voz y poses; José Soriano, quizás en el rol más estereotipado de la película, pero de igual manera muy bien interpretado; Marcos Mundstock y Daniel Rabinovich, como el cura y el rabino, que funcionan muy correctamente y le aportan un humor muy particular a sus momentos; Martín Piroyansky, el tonto, quien tiene sus buenas situaciones y Muriel Santa Ana, Gabriela Acher, Gino Renni y Luz Palazón, en personajes menores, pero igual de divertidos.
El gran acierto de esta propuesta, dejando de lado la dirección de actores, es la parte técnica. La fotografía es hermosa, el aprovecho de las locaciones abiertas y cerradas; la elección de planos y encuadres; el cambio de cámaras; el sonido y la banda sonora; las idas y vueltas narrativas que se entienden gracias a la edición; y el vestuario, todo presenta una excelencia que vale la pena destacar, principalmente porque se puede apreciar desde el comienzo, con esa escena dibujada y ese posterior travelling entre los árboles, el enorme y preciso trabajo de los técnicos responsables de la película.
"Mi Primera Boda" es una cinta muy divertida, con actuaciones muy correctas y un tecnisismo inmejorable. Una propuesta diferente del cine argentino, bien pensada, que, pese a caer en algunos estereotipos, entretiene y cumple con su objetivo. Un film que encamina para otro lado a la comedia nacional. Junto con "Un Cuento Chino", la mejor comedia argentina del 2011.

UNA ESCENA A DESTACAR: invento chino.
UN DATO: Quédense en los títulos finales, hay algunas escenas más.