La floja secuela que es una precuela
Se trata de la precuela de “Mi villano favorito” (2010) travestida de secuela de “Los Minions” (2015), personajes de quienes no se cuenta nada nuevo.
Minions: Nace un villano (Minions: The Rise of Gru, 2022) es una excusa para poner nuevamente en situación, una vez tras otra, a los pequeños secuaces amarillos de Gru (Steve Carell en idioma original y Andrés Bustamente en el doblaje) en divertidas y erráticas oportunidades. Como toda película de sketches que se traduce en gags algunos funcionan mejor que otros, pueden verse aisladamente, pero sobre todo no encuentran coherencia discursiva en el hilo narrativo.
La historia que sí se cuenta es la de Gru en edad escolar, que busca ingresar a un club secreto de villanos para adquirir adiestramiento pero, lejos de que eso suceda, es atrapado por los villanos de élite y los Minions irán a su rescate. Recién ahí, en esa segunda parte, los personajes del título encuentran su momento en la película para orquestar planes que fracasarán con gracia por su habilidad extraordinaria para equivocarse.
La otra excusa que aprovecha Minions 2 es la época de infancia de Gru. El film recrea los años setenta con todo el imaginario que va desde la música disco de Donna Summer hasta la motocicleta chopera de Easy Rider (1969), incluyendo disfraces elocuentes para los seres amarillos. Más allá de esta estética vintage, no hay nada nuevo que contar de los carismáticos personajes. Los Minions están de vuelta con una propuesta tan torpe y fallida como las planificaciones de rescate de sus pequeños protagonistas.
En el doblaje latino aparecen voces reconocidas como la del periodista cinematográfico ahora conductor de la alfombra roja en los Oscar Axel Kuschevatzky (Sr. Perkins), Christian Martinoli (Manos de acero), Edgar Vivar (Silas Pietraserón) el señor barriga del Chavo del 8, Itatí Cantoral (Dona Disco), de la telenovela María la del barrio y Luis García (Svenganza) ex futbolista mexicano.