Una mujer comienza a destruír la vida de la nueva esposa de su ex marido en este thriller protagonizado por Katherine Heigl y Rosario Dawson. Con ecos de "Atracción fatal" pero sin la intensidad ni el suspenso que la historia prometían.
El tema de los celos y las obsesiones devenidas en locura han sido bien plasmados por exponentes como Atracción Fatal o La mano que mece la cuna, que acá alcanza una suerte de reformulación de la mano de la directora Denise Di Novi, quien acredita una larga carrera como productora de las películas de Tim Burton y que ahora debuta en este thriller sobre rivalidad femenina.
En mío o de nadie, Tessa -Katherine Heigl, de la serie Grey´s Anatomy - es la madre perfecta, segura de sí misma y de su imagen impactante, pero cuya vida tambalea cuando su ex marido David -Geoff Stults- forma pareja con Julia -Rosario Dawson-. Tessa comienza a perder terreno y cuando se entera que ellos se casarán y se harán cargo de la custodia de su pequeña hija dos días a la semana, todo explota.
Este es el comienzo de un thriller que expone una guerra entre mujeres que defienden lo suyo y con una obsesión por la perfección que también encamina a Tess hacia la locura.
El film tiene momentos de tensión aunque resultan previsibles, utiliza el facebook como arma para que Tess comience a manipular la vida de su nueva rival -que además arrastra un pasado de violencia familiar-, pero se sostiene por la presencia de Katherine Heigl y Rosario Dawson, ambas actrices correctas en sus respectivos papeles. El relato ofrece una serie de situaciones vistas anteriormente que no tienen ni la intensidad ni el suspenso que prometían.
Al elenco se suma Cheryl Ladd -recordada por Los Angeles de Charlie- como la madre obsesiva de Tessa. De tal palo, tal astilla y Tessa, que va de la perfección al derrumbe personal y familiar. Para no estar fuera de tono con la época, el final resulta casi hilarante sin proponérselo y entrega violencia, entre tomas subjetivas y con una forzada vuelta de tuerca.