En el norte de La Pampa existió un pueblo que hoy yace tapado por la soja. Su vida se cortó abruptamente en 1911, y casi nada sobrevivió de él en la memoria de los pobladores de la zona. Hace 4 años, un grupo de alumnos que realizaba un picnic frente a una estación de tren bandonada descubrió que algo brillaba en la llanura. Eran miles de fragmentos y removidos por el arado. Muchos pueblos pampeanos fueron desapareciendo a lo largo del siglo XX por motivos diferentes. Casi todos tienen algo en común: ya casi nadie los recuerda. Sobre las historias que sobrevuela este documental subyace una duda incómoda: tal vez sea falsa la idea de que siempre algo perdura en la memoria.