Sexta ya? Como pasa el tiempo... ¿Y tienen para seguir contando cosas? La respuesta es si, y se podría agregar que cada vez mejor.
Tom Cruise no está bien de la cabeza. Su obsesión por hacer las cosas el mismo y cada vez mejor me cuesta creer que terminen bien, pero mientras a disfrutar tanta locura.
En esta película por ejemplo una escena donde dos se tiran de un avión, la hicieron 106 veces según contaron en Cinemacon, donde estuve presente. Y para que dure apenas unos minutos.
Así debe haber sido con muchas cosas. Desde las tomas increíbles en moto (no pueden faltar), hasta las escaladas por la piedra como en la segunda. O sea está lo que cualquier seguidor de esta saga puede esperar.
Pero lo que más sorprende es que la película dure más de dos horas y esté al palo el 90% de la misma! Eso es una locura.
Elenco perfecto, historia como excusa para unir cosas, pero un suspenso increíble, el despliegue de trucos maravillosos y un 3D innecesario.
Bravo por esta nueva entrega que nunca hay que olvidar no se llama Misión difícil... es imposible todo. Y paga la entrada!