Gracias al esfuerzo de un productor perseverante Misión secreta es una película que logró llegar milagrosamente a las salas de cine, ya que tenía todos los ingredientes para terminar director en video.
El film representa la ópera prima de Michael Brandt, quien hizo un gran trabajo como guionista en la remake de El tren de la 3: 10 a Yuma pero acá ofrece un film sumamente trillado que tiene dos problemas graves.
En primer lugar Topher Grace (de la serie That ´70 Show), quien resulta absolutamente inverosímil como agente del FBI.
Su labor simplemente no es creíble y es difícil comprarle que es una gente de la ley porque es un actor que no convence en ese tipo de roles.
La trama tiene que ver con el clásico cuento del agente experimentado de la CIA retirado, (Richard Gere) que vuelve para un trabajo final cuando reaparece un asesino de de la Guerra Fría, que supuestamente estaba muerto, y trabaja para los diabólicos rusos.
El nombre del criminal encima es conocido como Cassius, que debe ser la identidad más trillada que existe en la literatura de espionaje.
Sean libros de Tom Clancy o Robert Ludlum siempre aparece alguien que se llama Cassius. Es un clásico.
El segundo problema es que al revelarse tan rápido la identidad del asesino, Misión secreta pierde el único elemento de interés que podría llegar a mantenerte enganchado si encontrabas este film en la televisión.
Mentira, probablemente hubiera cambiado de canal, pero si estás en el cine sí te quedás para ver quién es Cassius, que por como está hecha el film resulta bastante obvio en la trama.
Son complicadas estas películas porque por un lado no son buenas pero la gente las elige para entretenerse un rato y tampoco me parece mal.
En el video club de mi barrio un propuesta como Misión secreta la rompe los fines de semana y es muy complicada encontrarla disponible porque vuela.
Seguramente va ocurrir lo mismo cuando se estrene este film en dvd.