La historia nos muestra a un adolescente que no logra conectarse con los demás, sólo con su abuelo, habla de los vínculos entre padre-hijo-nieto, en un cuento asombroso. Contiene una estupenda estética típica de las tramas de Burton, es bien burtoniana, con toques de varias de sus películas como “El joven manos de tijera”. Llena de personajes bien marcados, visualmente fascinantes, maravillosa paleta de colores, con un buen toque victoriano. A través de su protagonista ingresamos como si fuera en el túnel del tiempo, a un mundo mágico y lleno de fantasías, muchas escenas estupendas pasando por un parque de diversiones, un barco en el fondo del mar, entre otras situaciones. Eva Green como ya nos tiene acostumbrados se luce, con cierta similitud a los personajes que compuso en la serie de televisión “Penny Dreadful" o puede ser una Mary Poppins alocada. Varios villanos entre ellos Samuel L. Jackson en la piel de Barron. Un importante elenco secundario y breves apariciones de Judi Dench y Rupert Everett. Posee algunos problemas de guión sobre todo en algunas escenas que extiende demasiado y tal vez otras resultan poco aprovechadas. Un film que nos ofrece: magia, fantasía, aventura y mitología. Logra mantenerte entretenido y tiene una cuidada fotografía.