Siglo XIX. A través de un viaje de Portugal a Francia, Italia e incluso Brasil, asistimos a una vorágine de aventuras y fugas, coincidencias y revelaciones, romances, pasiones violentas y venganzas. En Lisboa, una ciudad llena de intrigas e identidades falsas, varios personajes están vinculados de una u otra manera al destino de Pedro da Silva, un huérfano que vive en un internado: el padre Dinis, un descendiente de aristócratas libertinos, que se convierte en héroe defensor de la justicia; una condesa enloquecida por los celos y sedienta de venganza; un próspero hombre de negocios que hizo fortuna como pirata sanguinario.