Pongamos las cosas en claro: Fue un teleteatro de gran despliegue que cosecho enormes audiencias en su país de origen y en el nuestro. Por eso a sus productores se les ocurrió que resumir los más de cien capítulos en dos horas y pasarlos por el cine iba a repetir el suceso y el Brasil tuvo un éxito arrasador y aquí esperar repetir el acierto. Obvio que se nota en diálogos y situaciones que alteran los hechos bíblicos en algunos detalles, la profusión de planos y contraplanos, que se trata de un lenguaje propio de la televisión que nada tiene que ver con el cine. Sin embargo explotaron al máximo todo lo invertido en efectos especiales: las plagas y las aguas que se abren para darle todo el tiempo necesario que los fanáticos revivirán con satisfacción. En apariencia dedicada a un público cautivo que siguió con santa paciencia todo lo que ocurría capítulo a capítulo, que se supone concurrirán a revivir lo que vieron por la tele lo único que notaran es que el resumen tiene un narrador. Y algunos diálogos se volvieron a grabar para prolijar el material que ya tenían. Es tele de un nivel de producción excepcional para el género pasada en el cine. Resumen de la tele bien hecho nada que ver con el lenguaje cinematográfico.