Monos

Crítica de Hernán Cortés - Otros Cines

Tras pasar por los festivales de Berlín, Sundance y Cartagena, Landes (Porfirio) plantea una ¿apócrifa? guerrilla en la que un grupo de chicos -cinco hombres y dos mujeres- alojado en un refugio de montaña mantiene cautiva a una ¿diplomática? norteamericana. Nada está del todo claro aquí, y ese es uno de los méritos de esta enigmática y vibrante película. Los lineamientos militares a seguir llegan por parte de un superior que los visita cada tanto, pero lo cierto es que estos jóvenes tienen sus propias reglas y cabecillas.

El romance entre dos de ellos y un suceso alrrededor de una vaca que cuidan radicalizarán cada vez más la postura del grupo, que se mueve entre la disciplina castrense y la ley de la selva (justamente uno de los escenarios donde transcurre el último -y fatal- tramo del film). Con una fotografía notable y rasgos de Los salvajes, del argentino Alejandro Fadel (no faltan pasajes oníricos), Monos resulta una propuesta tan provocadora y extrema como estimulante