Mr. Kaplan es la comedia dramática de suspenso dirigida por Álvaro Brechner y basada en el libro colombiano El salmo de Kaplan, fue elegida para representar a Uruguay en los Premios Oscar.
Wakolda en bermudas
Jacobo Kaplan era casi un niño cuando escapó de Polonia durante la guerra y no volvió a ver a sus padres. En Uruguay formó una familia y se construyó una buena vida pero al acercarse a los ochenta años sabe que no le queda mucho tiempo y que aunque nunca olvidó las palabras de su padre augurándole un futuro brillante, aún no ha hecho nada importante por el mundo. Aburrido y enojado con su propia vejez, recupera el entusiasmo cuando en una reunión familiar su nieta le menciona una playa alejada que suele visitar y donde hay un bar manejado por un anciano alemán al que apodan el nazi. Influenciado por las noticias que hablan de casos similares en otras partes de latinoamérica, Jacobo se convence que se trata de un oficial nazi prófugo viviendo de incógnito y se obsesiona con demostrarlo para hacer su aporte a la causa hebrea.
Jacobo contra los molinos
La necesidad de movilizarse despues de perder su registro de conductor lo convence de contratar en secreto a Wilson, un hombre que fue policía pero abandonó lo fuerza por motivos que prefiere no revelar y desde entonces su vida no tiene rumbo, por lo que necesita del trabajo más de lo que deja ver. Jacobo comienza menospreciando a su fiel y bonachón asistente, al que maltrata con un sarcasmo cruel pero con el que eventualmente desarrolla una amistad profunda que los vuelve inseparables. La dupla de improvisados investigadores comienza por seguir al alemán en sus movimientos diarios pero con el pasar de los días y con métodos poco ortodoxos logran ir averiguando detalles sobre su pasado que logran convencer cada vez más a Jacobo de su teoría. Sin dejar de expresar su escepticismo, el leal asistente lo acompaña a infiltrarse en un funeral o entrevistar gente que conoce al misterioso alemán intentando conseguir alguna evidencia contundente que los lleve a determinar la verdadera identidad del hombre antes de llegar a Uruguay.
Esta historia que podría relatarse como un oscuro drama de misterio es en cambio una comedia dramática ágil y entretenida que no usa el gag directo sino que genera situaciones que resultan cómicas o absurdas por sí mismas sin necesitar de un remate. Como no abusa del humor, no se ven fuera de lugar algunos momentos emotivos que nos recuerdan que en el fondo la investigación es un tanto secundaria al lado de las ideas sobre la edad, el éxito y la familia que debe cuestionarse Kaplan para poder hacer las paces consigo mismo. El guión es bastante directo, no se desvía en líneas secundarias y cuando lo hace es porque son importantes para explicar lo que está por suceder en el eje principal. Todo lo que sucede parece ser por algo y pocas cosas podrían quitarse sin afectar al conjunto, dedicando tiempo para profundizar sólo a los personajes que son necesarios dejando al resto como simple apoyo. Visualmente no propone nada espectacular, pero igualmente tiene una calidad de imagen más que aceptable tanto desde la fotografía como del diseño de arte y el montaje que sirven para sostener las actuaciones de los dos protagonistas en una fluidez constante que no se corta antes del final.
Conclusión
Mr Kaplan no es una película pretenciosa, es sólo lo que quiere ser: una comedia familiar con mezcla de drama que entretiene, divierte y cuenta una historia apta para todo público ideal para llevar al zeide al cine.