Recuperar el amor
Basada en la novela homónima, Nessuno si salva da solo (Nessuno si salva da solo, 2015) se instala en la crisis matrimonial de una pareja de mediana edad. La historia tiene el epicentro en una cena de reencuentro de la pareja para organizar las vacaciones de los niños en común, motivo para que varios flashbacks recuperen los momentos felices hasta el gris presente del vínculo.
Dirigida por Sergio Castellitto (Volver a nacer) y con guión de su esposa Margaret Mazzantini, autora de la novela, el film plantea si se puede o no salir de la monótona rutina que propone la vida en familia. Delia (Jasmine Trinca) y Gaetano (Riccardo Scamarcio) ya separados se juntan en un restaurante y repasan su historia de amor con posibilidad de volver a juntarse. Del amor a la frustración, la película se concibe en tres partes: cuando se conocen hasta el nacimiento de su primer hijo (momento de felicidad supremo), el estancamiento del día a día con la llegada de su segundo hijo, y las peleas, con faltas de respeto, infidelidades y reclamos por doquier. Los distintos momentos son representados con alguna que otra metáfora (la pareja que cena a su lado, la figura del padre comprensivo en el colegio de sus hijos) para narrar desde los vínculos entre los personajes.
Estamos frente a una película de personajes, donde la narración no es el motor de la historia sino los distintos obstáculos que se le presentan a la pareja y su manera de sortearlos. Castellitto logra trasmitir la pasión y sufrimiento en el vínculo amoroso con humanidad y ternura, haciendo querer a la dupla protagonista (ganadora del premio David di Donatello por su interpretación) desde el primer minuto para contar sus alegrías y pesares.
En esta línea de films que retratan la crisis matrimonial, Nessuno si salva da solo se asemeja a la reciente Mon roi (2015) con la cual comparte varios puntos en común en la reconstrucción idílica y posterior declive de una pareja. Un tema recurrente en tiempos de individualismo y objetivos de vida personal, incompatible con el sacrificio por el prójimo.
No es la primera novela que el director adapta de su mujer pero si la primera en que ella participa directamente en el guión. En una entrevista para cineuropa.org Sergio Castellitto dirá que concibió el relato como una canción, siendo los episodios en el restaurante el estribillo. El resultado es contundente, con el ritmo y la frescura de las mejores baladas.