Cada tanto, el periodismo me regala instantes mágicos, como el vivido durante la presentación de este película ayer, jueves, en el Gaumont. Como en muchas oportunidades, aparezco por sala sin mucha información de prensa y en esta oportunidad, me tocó vivir un emotivo acto de presentación de este documental, en el que se mezclaron muchas emociones: Nicaragua es una geografía muy especial para mí y su revolución sandinista un hecho histórico que aún conmueve por el momento en que se desarrolló. Este registro es una suerte de homenaje a esos hombres que creyeron en un cambio político de envergadura y fueron capaces de llevarlo adelante, contra toda adversidad.
Nicaragua tuvo un familia que se erigió como autoridad durante muchas décadas, amparados en un sistema corrupto (y financiado por EEUU) que le permitió crecer económicamente a unos pocos y sumergir a la población en la pobreza y el analfabetismo más absoluto. Campesinos nucleados bajo el Frente Sandinista (nombre que tomaron del revolucionario que fue símbolo de la resistencia contra la dictadura y fuera asesinado en 1934) lograron derrocar al régimen en 1979. Este documental de Roberto Persano y Santiago Nacif Cabrera aborda la reconstrucción de ese período de consolidación de ese cambio a través del relato de exilados argentinos que formaron parte de dicha gesta.
No era un destino cómodo, Nicaragua, pero eran años difìciles y muchos locales (dada la grave situación en nuestro país a principios de los 70') decidieron unirse a la causa más trascendente en ese tiempo y partir a luchar contra Somoza (el dictador). Pero así como sucedió con Cuba, la desigualdad reinnate, convocó la lucha de revolucionarios de todas partes de América Latina para dar batalla. La lente de los directores se centra en un grupo de hombres y mujeres que narran su experiencia en esos días de tanta movilización. La seguridad, la campaña de alfabetización, la lucha a brazo partido con los "Contras" (brigadas pro régimen que contaban con apoyo estratégico y dinero del gran país del Norte), son ejes en los que se apoya el relato y que van delineando un recorrido rico, lleno de matices ideológicos notables, que funciona como documento que retrata una época central en la historia de nuestra región.
Un gran montaje, excelente material de archivo y relatos cargados de imágenes bellas se van sucediendo a medida que la composición se profundiza. Emociona ver incluso la caída de los sandinistas (el neoliberalismo al final se impuso en los 90' con Violeta Chamorro como abanderada) y la hidalguía de sus líderes (con su actual presidente a la cabeza, Daniel Ortega) a la hora de reflexionar sobre los ideales que impulsaron la lucha y el desarrollo de esos eventos.
En síntesis, un gran documental para aquellos que conocen sobre el tema y una gran oportunidad para los que no. "Nicaragua, el sueño de una generación" logra conmover, sin dudas y llega en estos días, cuando se cumplen nada menos que 33 años de aquella gesta heroica (ese país fue el primero que vio a un dictador ser derrocado por fuerzas populares). Un solo horario en un solo cine quizás no sea cómodo pero... Vale la pena.