Desde que la censura lo permitió, el cine de terror ha encontrado en los embarazos un buen punto de partida para contar historias. Tras años luchando por formar una familia, Julie Rivers (Melissa Barrera, la actriz de las nuevas Scream) está embarazada nuevamente y se muda a una nueva casa con su marido. Ambos cargan con la angustia y el temor a volver a perder al niño. Luego de un misterioso incidente que sufren en la casa, el médico de Julie le ordena guardar reposo absoluto. En un principio ella no está contenta con el plan, pero se resigna para cuidar su embarazo. Es entonces que aquel incidente que parecía aislado se transforma en algo constante. Julie comienza a sufrir unas visiones aterradoras que luego parecen ir más allá. No está segura si está enloqueciendo o si hay algo o alguien que tiene un interés particular en el bebé que ella lleva en su vientre.
No descansarás, título en castellano insólito para la película Bed Rest, tiene ese problema insalvable de las películas que no tienen identidad o elemento claramente diferenciador. Estéticamente no aporta nada relevante y se mueve por los lugares más conocidos, avanzando de forma previsible por los pasos de esta clase de películas. Falla al mostrar el trauma de la protagonista y con eso pierde la chance de que nos importe todo lo demás. Un tema con el cuál es tan fácil conectar, resulta irrelevante, no importa los giros que aporte en la segunda mitad del largometraje. La responsable del guión y la dirección es Lori Evans Taylor, también productora. Esta es su opera prima, pero no parece un comienzo muy alentador.