Costumbres italianas
Checco (Checco Zalone) tiene 38 años y un trabajo estable como funcionario de gobierno, vive con sus padres y disfruta de ser un niño mimado sin preocupaciones. Además tiene una novia con la cual evita formalizar. Pero su vida “ideal” se verá trastocada cuando por la crisis el Estado decida centralizar todo, por lo cual Checco deberá elegir si aceptar una jugosa indemnización o ser trasladado. Guiado por el corrupto senador Binetto (Lino Banfi) decide que la actitud no se negocia y acepta ser trasladado. Pasa por los lugares más réconditos de Italia hasta que la despiadada Dr. Sironi (Sonia Bergamasco), una funcionaria de segunda línea que busca llegar al nuevo gabinete nacional, lo envía al Polo Norte y lo que parece una pesadilla para Checco será un paraíso cuando conozca a Valeria (Eleonora Giovanardi), una investigadora que le mostrará un modo de vida más simple cuando lo lleve a su casa en Noruega.
Llega a las salas argentinas la comedia italiana más taquillera de la historia de ese país, una crítica al sistema con algunos puntos más divertidos que otros. La película cae en clichés que abundan en el género por lo que es algo predecible.
Algunos chistes bien construidos y el choque de culturas ente Italia y Noruega son de las mejores cosas de la película que no es tan larga pero hay cosas estiradas que hacen que se sienta un poco pesada.
Checco Zalone es un actor, humorista y presentador italiano de los más exitosos en Italia, que en esta película no solamente es el protagonista sino que escribe y hace la música (con un seudónimo). Es su cuarta película en colaboración con el director Gennaro Nunziante.
¡No Renuncio! es una película decente para aquellos que quieran reír un rato, no aporta nada pero tiene momentos divertido y vale la pena para aquellos que quieran indagar un rato en un cine que en Argentina no es tan popular.