Dibuja tu vida
No te preocupes no irá lejos cuenta la historia de vida de John Callahan, un pintor de casas con un severo problema de alcoholismo. Tras un accidente que lo deja paralizado de la cintura para abajo y con limitado movimiento de sus brazos, encuentra en el arte de la caricatura una manera para hacerle frente a su adversidad.
En materia guión la película es todo un ejercicio de personaje: no hay una meta dramática específica, sino que oscila entre momentos cruciales en la vida de John antes y después del accidente que le genera su discapacidad. Aunque se enfoca bastante en su alcoholismo, a mitad de camino es reducido a una cuestión secundaria ante la publicación de sus caricaturas, donde una es más controversial que la otra.
Los momentos de incomodidad son sendos a lo largo del film, a nivel personal y a nivel público, al enfrentar tanto felicitaciones como represalias por el negrísimo humor de sus caricaturas, en las que figuran no pocos momentos cómicos muy logrados.
En materia actoral, descansa íntegramente en los hombros de Joaquin Phoenix, quien da vida al protagonista con una acertada intensidad sea en los momentos dramáticos como en los cómicos, los que pocas veces están exentos de una veta de humor negro. Entre los secundarios, Rooney Mara, dando vida a su enfermera, se muestra efectiva como su interés romántico. No obstante, quien verdaderamente destaca en este plantel es Jonah Hill como un excéntrico millonario que ayudará al protagonista a salir del abismo del alcohol.
En materia técnica, la película se limita a acompañar la labor actoral con primeros planos que te adentran en el punto de vista de Callahan y su lucha. Cabe señalar la buena labor de montaje, ayudando a que la narrativa fragmentada llegue a suficiente buen puerto.