Una madre y una hija, una casa demoníaca y una bruja sanguinaria son los elementos de esta película de terror, pero quedémonos con “madre e hija”, porque a través de los sustos, el film es un recorrido por las relaciones conflictivas que tal vínculo permite adivinar. Si la película no es mejor se debe a evidentes lagunas en el guión y a un escaso presupuesto, que aparece bien aprovechado cuando se trata de golpes de efecto.