Cameron Diaz es una de mis actrices de comedia favoritas, y ni hablar cuando se pone en modo guarra y nos entrega delicias cuestionables como The Sweetest Thing o la irreverentemente genial Bad Teacher. Con un título tan picante como Sex Tape, una pareja con tanta química como Jason Segel y un director capaz como lo es Jake Kasdan -el trío trabajó en la recién mencionada película de la profesora- se podían esperar grandes cosas. El resultado final no podía ser más decepcionante, con una comedia que tiene una buena trama pero que se estanca durante varias fases, con pocas escenas donde las carcajadas abundan.
La Nueva Comedia Americana nos trajo este mismo año una producción explosiva como lo fue Neighbors, por lo cual era de esperarse el mismo nivel de bromas burdas y pasadas de rosca que en la película de Seth Rogen, teniendo en cuenta que su director, Nicholas Stoller, hace las veces de guionista acá. Y nada habilita a más escenas hilarantes que una pareja intentando recuperar un video sexual casero a toda costa. La desgracia cae cuando se desarrolla el nudo del conflicto. Tras un primer acto donde se nos presenta a una pareja que tiene muchas conexiones, tanto dentro como fuera de la cama -o biblioteca, auto o cualquier lugar donde se les ocurriese tener sexo- hay muy pocos lugares a los que recurre Sex Tape para sacarle una risa al espectador. Si tuvieron la fortuna de ver Neighbors, habrán notado que dicha comedia recurría a muchos y no dejaba ningún tabú de por medio, a la vez que ahondaba profundamente en el concepto de un seno familiar donde los padres se planteaban si todavía podían divertirse como si tuviesen 20 años. Éste no es el caso, ya que al deseo sexual en una dupla con hijos apenas si se hace referencia y los momentos de comedia no ayudan demasiado al tópico. ¿Una larga escena donde un perro feroz ataca al protagonista masculino? ¡Qué innovador! ¿Una lista de corrido de diferentes sitios porno? Wow, un festín de risas.
Amén de un cameo que no vale la pena revelar para al menos guardar esa sorpresa, el elenco es bastante sólido, lo que hace que la propuesta no sea tan desastrosa. Diaz y Segel ya demostraron anteriormente que tienen pasta de comedia dura y la pareja amiga, encarnada por Ellie Kemper y Rob Corddry, aliviana el ambiente, además de la increíble labor de Rob Lowe como un potencial jefe para Cameron, un señor un poco extravagante con un pequeño problemita con cierto polvo blanco y películas de la factoría Disney. Ciertamente, la razón de que Sex Tape no se lleve un rotundo desaprobado es su intervención.
Había verdadero potencial en la historia de este video casero suelto por las redes, pero con un guión de poca gracia casi nada pueden hacer los protagonistas para salvarse del escarnio público.