El film de terror dirigido por Stacy Title es efectivo en algunos momentos y, por otros, es completamente predecible.
Dos amigos y la novia de uno de ellos se mudan a una casa ubicada cerca de la facultad en la que estudian. Lo novedoso de la nueva vida se oscurece cuando descubren que en ella habita una presencia extraña, a la que deben evitar nombrar.
Nunca digas su nombre (The Bye Bye Man, 2017) es similar a varias películas de terror. Desde el escenario en el que transcurre hasta la historia que presenta es fácilmente reconocible en otros films protagonizados por adolescentes que son perseguidos.
Además, los efectos visuales parecen anticuados y resultan poco creíbles.
Nunca digas su nombre es una película de terror más; cumple con su género, pero no sobresale.