Hay una máxima en el cine, filmar sobre lo que se conoce, si este no es el caso queda la variable de la investigación. “Desesperado por pagar sus deudas, un hombre intenta secretamente manipular a su padre para que venda su funeraria. Sin saberlo, desatará a un espíritu maligno que tiene la mirada puesta en su esposa embarazada”. Esta seria la primera síntesis argumental, hay una pequeña diferencia, el hijo necesita que el padre salga de garante con la propiedad, no venderla. Segunda sinopsis un poco mas certera: “El hijo de un funerario judío ortodoxo regresa a casa, acompañado de su esposa embarazada, con la esperanza de reconciliarse con su padre. Lo que ninguno sospecha es que un demonio ancestral ha poseído un cadáver y quiere arrebatarles al nonato”. El filme se estructura como cualquier otra producción que se adhiera el genero del terror, sin embargo la diferencia radica en que en principio no recurre a los exabruptos sonoros para sobresaltar al espectador. Se apoya mas en el detallismo de los espacios, el interior predominantemente lúgubre, de