Un thriller impactante, violento y oscuro. Con la solidas, efectivas y creíbles actuaciones de Forest Whitaker y Orlando Bloom. En algunas secuencias uno puede recordar la película “Diamantes de sangre”. Una imponente fotografía que va mostrando las distintas situaciones, va creando interesantes climas, también se apoya en la banda sonora de Alexandre Desplat. Más fuerte que “Ciudad de dios” y “Tropa de élite”. Toca demasiados temas y no llega a resolverlos.