Si hay producciones cinematográficas que admiro, son aquellas que se arriesgan a contar cosas diferentes y que no solemos recibir en nuestras salas. Si bien muchas veces el resultado final no es del todo bueno, valoro que se animen a probar cosas nuevas, como es el caso de Oso intoxicado.
Basada libremente en una historia real, Oso intoxicado nos cuenta los eventos sucedidos en Kentucky, cuando en una zona boscosa, un oso negro encuentra y consume varios paquetes de cocaína, volviéndolo extremadamente agresivo, pero, sobre todo, adicto a dichos polvos.
Oso intoxicado está dirigida por Elizabeth Banks, culpable de la última versión de Los Ángeles de Charlie, cinta que es por todos sabidos, fue una gran bola de caca, así que las expectativas con respecto a un nuevo proyecto suyo eran nulos. Pero cuando se filtró la historia de Oso intoxicado, haciendo que a la gran mayoría de golpe si nos interese.
Y es que seamos honestos, por todos es sabido los efectos dañinos que causa la cocaína en los seres humanos. Imagínense la adicción que puede provocar en un animal irracional, que además es sumamente agresivo cuando se siente amenazado o alguien entra en su territorio. Pero si aparte le sumamos bastante humor negro y un poco de gore, el cóctel para la bizarreada estaba servido.
¿Pero alcanza eso para hacer de Oso intoxicado una buena película? La verdad que no. Si, disfruto bastante del gore cuando es usado para conseguir un chiste negro (que es un humor que amo), pero con poner sangre digital y situaciones wtf, no se sustenta una película que por momentos se acerca bastante a series como Reno 911; que en lo personal, no me gusta para nada. Y si hace le sumamos un casting que pareciera donde cada uno hizo lo que quiso…
Esto lo digo porque pareciera que la dirección de actores fue inexistente, con algunos de ellos (una pena ver a Ray Liotta en trabajos póstumos como este) tomándose el papel en serio, pero luego gente como Margo Martindale actuando como si estuviera en una Scary Movie. O todos actúan serios acordes al papel que les toca, o todos se comportan como una caricatura.
En cuanto a la dirección de Elizabeth Banks, también se siente bastante genérica, como si la hubiera dirigido cualquier persona, y no alguien que intenta hacerse un nombre en la industria, y que no es una directora debutante.
Para finalizar, Oso intoxicado es una película entretenida, pero para pasar el momento. No va a trascender como comedia negra o comedia en general, y con una dirección (tanto general como de directores) tan genérica, no sabemos que tan conveniente es que le den prioridad para verla en el cine.