Sharknado (2013), Serpientes en un avión (2006) y seguramente otros casos demuestran que no existen argumentos ridículos si de películas se trata. Otro gran ejemplo será Oso Intoxicado, film dirigido por la actriz Elizabeth Banks (Ritmo Perfecto, Los Juegos del Hambre) que se estrena el jueves 23 de marzo en cines.