Paul King (Paddington) nuevamente es el encargado de adaptar a la pantalla grande a uno de los personajes más famosos de Inglaterra. Así Paddington 2 (2017) se presenta como una nueva aventura del pequeño oso creado por Michael Bond y que ha permanecido en el imaginario popular inglés aún después de la muerte de su autor.
En esta nueva oportunidad Paddington estará obsesionado por conseguir el regalo ideal para su tía Luci. En la búsqueda terminará en una vieja tienda de antigüedades donde encuentra un libro ilustrado que esconde las pistas para encontrar un tesoro oculto. Viéndose involucrado en un desafortunado hecho, se termina por convertir en el principal sospechoso del robo del libro en cuestión.
Cuando la familia Brown, aquella que ha adoptado al oso amante de los sándwiches de mermelada de naranja, comience a investigar por su parte y desentrañe el misterio que oculta el libro y a aquel que realmente lo tomó “prestado”, se configurará un relato sobre el amor y la amistad, el trabajo en equipo, la persistencia y la devoción.
Paddington 2 está filmada con preciosismo y con un detalle que recuerda por momentos a aquellas producciones rodadas íntegramente en estudios, y con un guion de diálogos y situaciones plagadas de humor, naif por cierto, que emparentan a la película con clásicos de Buster Keaton, Charles Chaplin, Laurel y Hardy, y muchos más.
Tal vez la virtud más grande del relato es introducir al espectador en este cuento ofreciendo acción al mejor estilo de un libro pop up, evitando caer en lugares comunes e impulsando la historia a otros niveles, cuando por ejemplo, el pequeño oso debe adaptarse a la vida tras las rejas.
El mayor atractivo de esta historia son entonces los cuidados escenarios, la colorida feria de atracciones en la que se desenvuelve gran parte de la historia, y, principalmente, el nivel actoral con el que cuenta (el dream team de la interpretación inglesa actual: Sally Hawkins, Brendan Gleeson, Julie Walters, Peter Capaldi, etc.).
Mención especial para Hugh Grant quien se ubica como el villano de turno, al que se lo ve en su salsa disfrutando de su rol de “maestro del disfraz”. Elementos que hacen de Paddington 2 un entretenimiento noble, nostálgico, colorido y visualmente impactante, además de entrañable, para toda la familia.