El universo del rap y del freestyle no solamente está creciendo en los últimos años en nuestro país, sino que también se está volviendo cada vez más masivo y accesible, porque están saliendo más series y películas que abordan este mundo, haciendo que gente que no lo conocía, se empiece a interesar por las rimas, la crítica social y la competencia sana.
Después de su paso por el Festival de Cine de Mar del Plata, llega «Panash» a las salas comerciales, una película que se centra en una Buenos Aires distópica, donde reina la represión policial en las calles. Un grupo de raperos, preocupados por la situación actual, exponen la realidad a través de versos y rimas, enfrentándose entre sí. Allí conoceremos a Panash, una joven con un gran talento y espíritu revolucionario, que se enamora de un joven nuevo en el barrio, Isi. Es así como Ciro, uno de los líderes más respetados del lugar, ayudará a Isi a conquistar el corazón de Panash mediante su música, a pesar de que él también está perdidamente enamorado de ella.
«Panash» es una película que habla de muchas cuestiones. Por un lado es una historia de amor juvenil, que se plasma a través de un ida y vuelta musical. También es un film de denuncia, que expone el abuso de la autoridad policial, la situación en el conurbano, las adicciones, la lucha por los ideales, la revolución, el gatillo fácil. Y por último nos adentra en este submundo artístico del rap y el freestyle, plasmando una herramienta fundamental para que los chicos puedan expresarse. Esta mezcla de géneros por momentos está bien lograda y por otros se pierde un poco en su ambición, resaltando más cuando se vuelve una crítica social que cuando despliega el romance.
Es interesante que en vez de haber utilizado a actores para que interpreten estos papeles, sean verdaderos raperos los protagonistas de esta historia, como Homer el Mero Mero (Ciro), Real Valessa (Panash) o Lautaro LR (Isi), que si bien acá se muestra como alguien que recién se inicia en este camino no deja de ser una figura reconocida en el mundo real. Esto permite que sus personajes fluyan, se note el talento que hay en las rimas y la improvisación y la trama se vuelva más creíble.
Los aspectos técnicos cumplen con el propósito de servir a la narración. Para mostrar la represión policial se recurre a material de archivo de momentos de tensión y enfrentamiento entre las autoridades y la sociedad en 2001-2003 y 2015-2019, mientras que la parte musical se plasma como si fuera un videoclip. Además, el estar filmado en Fuerte Apache le otorga realismo a las locaciones y a ese espíritu del conurbano bonaerense.
En síntesis, «Panash» resultar ser un interesante film, que mezcla la crítica social con una historia de amor y una observación al mundo del freestyle. Por momentos estos tres ejes se presentan de manera armoniosa y en otros funciona más un género que el otro. De todas maneras, el arte consigue traspasar estas fronteras, y, a través del talento de los raperos implicados, transmitir un mensaje de lucha y perseverancia.