Papás a la fuerza

Crítica de Martín Morales - Cine y Movies

DOS ACTORES… MEDIO PERSONAJE

¿Qué sucede cuando se mezcla sobreactuación, poca originalidad, un humor tonto, un guión regular y mucha previsibilidad? El resultado… una película sin sorpresas, tonta, pasajera y sin la chispa necesaria como para intentar volver a verla.
Dos amigos inseparables están por cumplir su cometido de tantos años de trabajo. Pero sin previo aviso una mujer aparece y les da la noticia de que uno de ellos es padre de mellizos de 7 años. Ellos van a tener que lidiar con los niños y con el tratar de poder llevar a cabo la transacción laboral que tanto esperaron cumplir.
El film se introduce con una seguidilla de flashbacks que son uno de los fuertes que minutos después sustentarán el humor del guión (tatuaje). Es allí, desde un principio, donde la situación empieza a esclarecerse y donde los problemas comienzan a aparecer. Robin Williams y John Travolta están bien, pero sus diálogos poseen tan poca expresión y fluidez que ellos hacen un gran esfuerzo por hacer de sus personajes algo más creativos de lo que el guión expresa, lamentablemente no lo logran. El único personaje que domina una labor diferente y destacable es Seth Green, quien con sus gritos y momentos de locura logra sacar unas pocas sonrisas justificadas.
La historia es sencilla, poco original y previsible y más allá de eso, el guión se condimenta de un humor tonto, basado en los golpes, caídas y repeticiones, que aburren y expresan la poca originalidad de los guionistas y las ganas de seguir estancados en la gran laguna de la vergüenza ajena.
Por el lado técnico el film comienza regularmente, la edición es simple, el montaje muy dudoso y los efectos especiales correctos pero para nada llamativos.
Pero, como en un gran porcentaje de las cintas cinematográficas, esta posee algunos momentos divertidos, ya sean los del zoológico o los malentendidos con la edad de los protagonistas, que, aunque se hayan visto en los trailers promocionales, son de los mejor de la película y las únicas escenas diferentes.
“Old Dogs” es un film previsible, mal guionado, regularmente dirigido y con actuaciones que no logran destacarse pese a que sean de gran talento. Una cinta con un humor tonto, básico, poco inteligente y con un mensaje muy superficial. Una película divertida pero de las peores de Travolta y Williams.

LO BUENO: unas pocas escenas de humor
LO MALO: actuaciones, guión, dirección, humor, música, historia, previsibilidad, final, mensajes
UNA ESCENA A DESTACAR: zoo