El Holocausto en rigurosa película de corte teatral
Una aristócrata rusa exiliada en París que protegió a dos pequeños judíos. Un funcionario de la policía francesa, colaboracionista. Un refinado oficial alemán que antes de la guerra fue amigo suyo. Cada uno creía sinceramente en lo que estaba haciendo. Ahora cada uno está declarando ante un posible instructor de justicia, o un juez, o acaso el Juez, a quien no vemos. Este es un drama intenso expuesto de modo singular.
Confesiones, reflexiones y reconstrucciones se alternan en el relato, como se alternan los sentimientos en el público, a medida que va percibiendo los detalles del infierno y los dudosos alivios del purgatorio que han vivido estos tres infelices. También nosotros podemos juzgar, y acaso comprender. Película fuerte, vagamente emparentada con "Kapó" y "Portero de noche", pero de música envolvente, recursos brechtianos, formato cuadrado a la manera de aquellos tiempos, sugerencias amplias como puede haber en estos tiempos, filmada en imponente blanco y negro de tonos grises, igual que esas criaturas ante los ojos de la historia, y muy bien interpretada.
Autor, Andrei Konchalovsky, que hizo algunas películas malas, pero muchas buenas y muy buenas, como "El primer maestro", la inmensa "Siberíada", "Romance de enamorados", "Los amantes de María", "Escape en tren", "El cartero de las noches blancas" y este "Paraíso" que es una verdadera obra de madurez. Hablando de eso, el 20 de agosto Konchalovsky cumple 90 años, y sigue filmando (y su esposa, la notable Yuliya Vysotskaya que protagoniza esta película, tiene 44).´"Paraíso" obtuvo el Astor de Plata al Mejor Guión en el Festival de Mar del Plata 2016.