ParaNorman

Crítica de Diego Batlle - La Nación

Veo gente muerta

Tras su excelente presentación en sociedad con Coraline y la puerta secreta (2009), el estudio Laika regresa con esta película sobre un chico de 11 años que -como aquel de Sexto sentido- ve gente muerta. El resultado es una atractiva película de fantasmas, zombies y brujas realizada con la técnica artesanal stop-motion (animación cuadro por cuadro de muñecos), pero también con un amplio despliegue tecnológico y un acabado en 3D.

Los directores Chris Butler y Sam Fell -con algunos antecedentes en la factoría británica Aardman- narran las desventuras de Norman, un muchacho que tiene la extraña habilidad de conectarse a toda hora y en cualquier lugar con los múltiples espíritus que pululan por la ciudad. Esa capacidad, sin embargo, lejos de darle una ventaja comparativa, lo convierte en el freak de la escuela, en el objeto de todas las burlas e incluso de la violencia (el bullying, que también afecta a un amigo obeso, es uno de los temas laterales de la trama). Así, todos verán al pobre Norman hablando solo, cuando en realidad lo hace con su abuela fallecida o con algún fantasma que viene a reclamarle algo (no parece haber muchos muertos felices con su condición de tales).

Si el desdichado Norman debe enfrentarse a la trabajosa rutina cotidiana (con una mezcla de empeño y resignación), su situación se complica aún más cuando se entera de que una poderosa bruja de 300 años amenaza con una devastación a gran escala. Sólo él puede detenerla. Lo que sigue es una narración que incluye ejércitos de zombies, encantamientos y persecuciones varias en las que la belleza visual se mantiene, pero el vértigo le gana por momentos a la creatividad, generando así cierta sensación de agotamiento.

Más allá de algunos desniveles en el relato, ParaNorman es un film de notable factura, que se suma a una tendencia reciente (combinación de terror y comedia para un público infantil no tan pequeño) que ya tiene en cartelera a Hotel Transylvania y que desde la semana próxima sumará a Frankenweenie, de Tim Burton. Tres nobles productos del siempre lucrativo mercado de la animación..