Zombies simpáticos
La sobrenatural e intrépida comedia de horror ParaNorman 3D (2012), dirigida por Chris Butler y Sam Fell, transporta al espectador al pueblo de un chico incomprendido y con claridad sostiene que los verdaderos enemigos no son los muertos sino los vivos. Una entretenida ficción en stop-motion y en 3D para toda la familia.
Norman (en la voz de Kodi Smit-McPhee) es un chico diferente del resto. Puede ver a los muertos e incluso hablar con ellos. Por este motivo está sujeto siempre a la burla de sus compañeros de colegio. De repente algo transforma su vida: aparece su tío para contarle sobre la maldición de una bruja que la noche siguiente despertará y levantará a sus muertos de las tumbas. Para impedir un apocalipsis zombie él deberá leer un libro en el féretro de la hechicera, pero nada será demasiado fácil.
En esta animación se nota a las claras la colaboración de Laika, el estudio fabricante de contenidos animados de los creadores de Coraline y la puerta secreta (Coraline, 2009), una obra maestra de Henry Selick , quien se lució también con El Extraño Mundo de Jack (The nightmare before Christmas, 1993) para Tim Burton. Por este antecedente es que se pueden encontrar algunos pequeños signos estéticos de la filmografía burtoniana y bienvenidos sean, porque no desentonan en absoluto.
Más allá de esto, ParaNorman 3D no es una película oscura sino todo lo contrario. Si bien está sumida en el universo zombie y parodia las películas de terror de bajo presupuesto, el encanto del argumento está en que tiene divertidos toques de humor y los muertos vivos resultan ser amigables con el entorno, subrayando así la clásica actitud errónea de los seres humanos para con ellos.
Este film, que no cuenta con voces de actores reconocidos, se destaca por su frescura, su visión infantil de los monstruos y por los sobresaltos de Jon Brion, responsable de la banda sonora que le otorga un buen ritmo al relato.
Esta no será como las grandes producciones de Disney, Pixar o Dreamworks, pero merece una mención y seguramente sabrá ganarse su público. Divertida, alocada y equilibrada en todos sus aspectos. No desentona, no exagera y no empalaga.