El 21 de marzo de 1975 la Triple A secuestra, tortura, fusila y dinamita a ocho militantes populares del barrio San José de Temperley. Este hecho traumático se conoce como Masacre de Pasco y forma parte de una terrorífica sala de ensayo que preanuncia el llamado Terrorismo de Estado, cuyos objetivos fueron desarmar la organización territorial, paralizando y desacreditando la participación a través del miedo, y golpeando fuertemente un espacio del peronismo revolucionario que había logrado una importante legitimación a nivel institucional en Lomas de Zamora.