Deudora de varios clásicos del cine “Que Bello es Vivir” (1947) de Frank Capra, “El Cielo Puede Esperar” (1978) de Warren Beatty o su primera versión “El Difunto Protesta” (1943) de Alexander Hall.
En rigor de verdad tiene puntos de contacto con todas, pero no se parece a ninguna, no es una comedia romántica como las ultimas dos ni es un drama como la primera, todo un clásico navideño.
Se podría encuadrar dentro de las comedias dramáticas, a partir de esa primera estructura, el filme se basa libremente en dos cuentos cortos de Francesco Piccolo “Momentos de Inadvertida Felicidad” y “Momentos de Inadvertida Infelicidad”. Paolo (Pierfrancesco Diliberto, mas conocido como PIF), es un ingeniero que tiene un vida regular,