Lo que el tiempo se llevó
Lamentablemente la originalidad en el cine argentino, sobre todo en lo mainstream, se está perdiendo de a poco. Casi siempre terminamos percibiendo una especie de refrito de la versión estadounidense de lo que estamos viendo.
Perdida de Alejandro Montiel tiene todas las características típicas de un policial del país del norte y por eso peca de poco original, a pesar de estar basada en la novela “Cornelia” de Florencia Etcheves.
Trata internacional de personas, una policía osca con un pasado oscuro, un caso policial que vuelve todo el tiempo y unas flojas actuaciones son la receta para Perdida. Entre todo esto, un guion que termina siendo flojo por terminar siempre en los lugares típicos y un final (SPOILER ALERT) con una de las protagonistas, supuestamente argentina, pero con un inentendible acento español perfecto que parece que hubiese nacido en el medio de la Puerta del Sol, en vez de Plaza Flores, hacen repensar la idea de originalidad en las películas de gran presupuesto en Argentina.
Pero, porque siempre hay un pero, si te gustan los thrillers y disfrutas de la belleza de Luisana Lopilato, podes ir al cine a verla, porque a pesar de todo, hay que seguir apoyando a la industria nacional.