Peter Rabbit representa una de las grandes obra maestras de la literatura infantil que esa gran artista que fue Beatrix Potter creó a comienzos del siglo 20.
Los cinéfilos más memoriosos tal vez recuerden que hace unos años se estrenó una excelente biografía de la autora que protagonizó Renée Zellweger en Miss Potter.
Una propuesta que narraba el origen de este simpático personaje.
En la animación se hicieron muy buenas adaptaciones con las aventuras del conejo rebelde y aunque esta película no es la mejor de todas, tampoco resultó el desastre que parecía presentar el avance promocional.
El estudio Sony tuvo problemas con esta cuestión porque los trailers fueron masacrados por los medios de prensa de Inglaterra, donde Potter es una artista muy querida.
Las reacciones eran comprensibles porque en un principio parecía que el film de Peter Rabbit iba a ser otra producción mediocre del nivel de Garfield o Alvin y las ardillas.
Si bien la película no está a la altura de los que fueron las brillantes entregas de Paddington, que hoy representa la excelencia en el género infantil, tampoco es un completo desastre.
En Peter Rabbit se nota que hubo una puja entre los realizadores y el estudio por ser respetuosos con la obra de Potter pero al mismo tiempo adaptar al personaje en una propuesta moderna.
La irreverencia del conejo está claramente presente en la trama y tiene una presentación muy divertida que captura de un modo original su personalidad.
Aunque la trama no tiene nada que ver con los cuentos originales y juega por momentos con el humor negro, la película está plagada de referencias a la obra de Potter.
Sobresale especialmente una secuencia magnífica, donde se narra la historia del padre de Peter, que fue realizada con animación tradicional y utiliza las ilustraciones originales que presentaban los cuentos de la artista.
Rose Byrne inclusive interpreta a una ilustradora que se llama Bea y está claramente influenciada por la creadora de Peter Rabbit.
Un personaje que establece una muy buena dupla con el rol que encarna Domhnall Gleason (Star War Episodio 8), quien se luce en un divertido rol cómico.
La historia de amor entre estos dos personajes por momentos resulta más atractiva que los enredos de los animales, que estuvieron impecablemente diseñados por los efectos especiales.
Peter Rabbit tal vez no llega a capturar del todo la magia y poesía del arte de Beatrix Potter pero tampoco resulta tediosa como la mediocre película de El pájaro loco que era horrenda desde todo punto de vista.
Para los más chicos es un espectáculo atractivo y los adultos que los acompañen en el cine encontrarán un film ameno que logra ser entretenido.